-¿Qué
tal Gustavo?
-Pues
aquí, en este pueblo, porque no hay para dónde ir.
-En
otros pueblos la cosa está peor.
-Pues
sí. Aquí por lo menos sabemos dónde están los maleantes y podemos cuidarnos
mejor.
-Te
veo optimista.
-Hay
una razón. Cómo te parece que fui donde el médico a que revisara unos exámenes
míos. Y me dijo que tenía un principio de cáncer y eso me dejó tranquilo.
-Serás
el primero que recibe esa noticia con tranquilidad.
-Claro.
Me tranquilizó saber de qué me voy a morir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario